La COP29: Un paso clave hacia un futuro climático sostenible
La COP29, celebrada en Bakú, Azerbaiyán, marcó un hito en la lucha global contra el cambio climático. Con el mundo enfrentando temperaturas cada vez más altas y desastres naturales más frecuentes, la COP29 se centró en la urgencia de tomar medidas efectivas para mitigar los efectos del calentamiento global. Líderes internacionales, representantes del sector privado y activistas se reunieron para abordar la financiación climática, la adaptación, la mitigación y la transición hacia una economía verde.
Uno de los principales avances fue la negociación del Nuevo Objetivo Cuantitativo Colectivo (NCQG), que busca movilizar recursos financieros para que los países en desarrollo reduzcan sus emisiones y se adapten a los efectos del cambio climático. A pesar de la promesa de aumentar la financiación, la cifra alcanzada de 300.000 millones de dólares anuales hasta 2035 aún fue considerada insuficiente por los países en desarrollo, que hoy son más vulnerables a los efectos del cambio climático, lo que resalta la necesidad de seguir impulsando compromisos más ambiciosos.
Otro avance importante fue la progresiva creación de mercados de carbono globales bajo el Artículo 6 del Acuerdo de París, que permitirá a los países colaborar para reducir las emisiones de manera más eficiente. Sin embargo, la falta de compromisos claros sobre la eliminación de los combustibles fósiles fue una de las principales críticas de la cumbre.
Bolivia destaca la importancia de un financiamiento climático accesible y justo, abogando por la priorización de subvenciones en lugar de préstamos, así como por la creación de un fondo de pérdidas y daños que apoye a los países más vulnerables.
La COP29 dejó claro que la lucha contra el cambio climático es un desafío colectivo que requiere de la cooperación global. El compromiso de cada país es esencial para alcanzar un futuro más sostenible.