Inversión con propósito: los fondos de impacto para la conservación
Ante una crisis ambiental, pérdida de especies y ecosistemas y amenaza el equilibrio ambiental, surgen soluciones financieras con doble propósito: generar retornos económicos y conservar la naturaleza. Los fondos de inversión de impacto para la conservación son vehículos específicamente diseñados para dirigir capital hacia proyectos que restauran, gestionan y conservan ecosistemas clave, capturando tanto beneficios ambientales como sociales.
¿Qué son y por qué importan?
Según la definición general de impact investing, estas inversiones se destinan a organizaciones y fondos con la intención de generar un impacto social o ambiental medible, junto con una rentabilidad financiera.
Cuando ese impacto está focalizado en la biodiversidad, se habla de inversiones que acompañan prácticas sostenibles, como la agroforestería, el ecoturismo comunitario o la restauración de hábitats, a cambio de resultados medibles.
Según el estudio Inversión de impacto para la conservación de la biodiversidad: Casos de América Latina y el Caribe” (BID, 2021), en América Latina y el Caribe, una región que alberga más del 30 % del agua dulce disponible en el mundo y casi el 50 % de los bosques tropicales terrestres, estas inversiones podrían ser clave para cerrar la brecha de financiamiento que impide proteger sus activos naturales. Este estudio muestra un portafolio de instrumentos potenciales incluye desde financiamiento mixto (blended finance) hasta fondos colectivos y bonos verdes vinculados a la naturaleza.
Modelos reales con impacto
Un ejemplo concreto es el EcoEnterprises Fondo para la Biodiversidad y el Clima, promovido por BID Invest. Este fondo canaliza capital a pequeñas y medianas empresas que operan en la Amazonía, la región Andina y Mesoamérica, contemplando actividades como agroforestería regenerativa, ecoturismo inclusivo y conservación socioambiental. La meta: resultados tanto ambientales como económicos, con foco en la equidad de género y la inclusión indígena.
Más allá de la conservación y el desarrollo sostenible e inclusión
Estos fondos no sólo conservan naturaleza, sino que permiten que comunidades locales se beneficien económicamente, fortaleciendo modelos productivos sostenibles. Utilizan marcos de financiamiento mixto: combinan recursos públicos o filantrópicos con capital de mercado, una estrategia conocida como blended finance, para mitigar riesgos y hacer estos proyectos más atractivos a inversionistas institucionales. En Costa Rica, por ejemplo, se han usado estas estrategias para cerrar brechas financieras vinculadas a la pérdida de biodiversidad.
Asimismo, la iniciativa BIOFIN-PNUD en Bolivia trabaja en construir planes nacionales que incluyan mecanismos como fondos dedicados y bonos verdes, complementando los esfuerzos privados con un diseño de políticas públicas robusto.
Las inversiones de impacto dirigidas a la conservación representan una innovación financiera alineada con la triple crisis climática. No solo proveen capital para restaurar ecosistemas y proteger especies, sino que también crean oportunidades económicas inclusivas para comunidades locales. A medida que instituciones privadas y multilaterales avanzan en su implementación, estos fondos consolidan una herramienta clave para confrontar la crisis ambiental con soluciones financieras efectivas, medibles y éticas.

Financiamiento verde en acción: ECOVERDE y su impacto en miles de familias productoras
ECOVERDE un producto financiero verde, ofrecido por Diaconía IFD, diseñado para financiar medidas de adaptación al cambio climático, busca contribuir a mejorar la resiliencia al cambio climático de los pequeños productores agropecuarios.
ECOVERDE nació en 2017 como ECOMICRO, un proyecto piloto que buscaba apoyar a los pequeños productores agropecuarios en su camino hacia la sostenibilidad. Después de un exitoso período de prueba, en 2020 se integró como un producto crediticio oficial de Diaconía IFD, con el objetivo de ampliar su alcance y beneficiar a más productores.
Actualmente se implementa en todas las agencias a nivel nacional, con profesionales agropecuarios por región para asistencia técnica.
Entre las características de ECOVERDE:
– Financiamiento: Ofrece financiamiento para medidas de adaptación al cambio climático.
– Asistencia técnica: Proporciona asistencia técnica mediante especialistas agropecuarios.
– Promoción del manejo sostenible: Fomenta el manejo racional y sostenible de los recursos naturales.
– Mejora de la productividad: Busca mejorar la productividad y la calidad de vida de los productores.
Al cierre del 2024, la cartera ECOVERDE alcanzó los $34.1 millones de dólares, llegando a más de 7,457 familias agricultoras beneficiadas.